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"ARTE SOY ENTRE LAS ARTES. Y EN LOS MONTES, MONTE SOY"
JOSE MARTI.

miércoles, 23 de diciembre de 2009

FIN DE AÑO EN UNA CELDA (ARTÍCULO)

Por: Iliana Curra

Quizás las huellas que deja una prisión son imperecederas. De ella sales, pero siempre estás dentro. En los recuerdos. Nunca puedes olvidar, aunque te lo propongas. Sobre todo, cuando tanta gente sigue sufriendo en las mismas condiciones de siempre. Cuando no acaba el castigo para los que han quedado atrás. Para los que han ingresado después de tu salida.

Los días son difíciles en una celda de castigo. Los minutos se convierten en días cuando pasan con la lentitud del tiempo estancado, ese que no avanza aunque lo empujes con tu imaginación. Aunque te transportes lejos para verlo deslizarse a prisa.

Días y días que transcurren con la sádica demora de un espacio que llenas con simples repasos de lo que fue y lo que pudo ser. Situaciones que ya no cambiarán porque no puedes, y porque tampoco quieres. La vida te enseña que cuando haces algo, si estás conciente de ello, está bien hecho. No hay espacio para el arrepentimiento porque hiciste lo correcto, o lo que creías correcto.

Una celda oscura donde ni las manos te ves. El frío del cemento donde único puedes sentarte te recuerda la humedad que cala tus huesos para siempre. El ruido de insectos por doquier te hace pensar que estás en medio de una selva, pero de una selva tenebrosa y solitaria donde pudiera aparecer en algún momento una rata que merodea buscando qué comer. Ella también tiene hambre.

Es 31 de diciembre de 1994. Un año que termina de una manera espantosa y piensas que mañana será, quizás, un año diferente. Donde todo pudiera cambiar para bien, o para mal…

La guardia trae una bandeja que apenas puedes ver. Como alimento contiene algo de arroz y un hueso largo que tiene –si acaso- unos milímetros de una carne de ave. Dicen que es de oca, y que es una comida especial para las presas en este último día del año. El olor es insoportable e, irremediablemente, saco la bandeja por debajo de la reja. No puedo ni probarla. Mi estómago me pide a gritos, aunque sea, ese salcocho mal cocinado para sostenerse. Pero no puedo comer.

Entiendo que estoy muy débil y que debería esforzarme para sobrevivir. El frío es intenso. Mis manos congeladas se esconden en los bolsillos de un abrigo hecho de tela sin guata, confeccionado expresamente para las reclusas. Mis uñas no dejan de estar moradas todo el tiempo y me invade una soledad que nunca antes había sentido.

Pienso en mi familia. En mis visita suspendidas para aumentar el castigo. Pienso en los otros prisioneros políticos, que como yo, también están padeciendo lo mismo, y quizás hasta peor. Pienso en Cuba y en los millones de personas que esperan que el próximo año venga mejor. Que se acabe esa dictadura que los oprime. Pero yo estoy libre. No importa que esté en una celda húmeda, oscura y solitaria. Soy libre y eso nadie lo puede cambiar.

A lo lejos, escucho las voces de dos muchachas recluidas en ese destacamento. Un destacamento construido a lo lejos del penal, adonde nadie llega, para encerrar a presas infectadas con el virus del SIDA. Ellas también están solas, lejos de su familia y sin esperanzas de salir vivas de la cárcel. Siento sus risas y una alegría momentánea por algo que no comprendo. Me alegro por ellas, al menos ahora se sienten lejos de esa muerte que siempre las acecha.

Mis oídos, adaptados al menor de los ruidos, sienten pasos a lo lejos. Se acerca alguien, pero no son las botas de la guardia las que vienen hacia mi celda. Son pasos pequeños y suaves que se deslizan corriendo. Una risa traviesa llega a los barrotes de mi celda como el canto de un pájaro. Dos caras risueñas y llenas de emoción se paran a unos pocos metros, y cuando se sintieron seguras al verme en la sombra, sus manos traspasaron las rejas frías de una noche invernal para, con sus puños cerrados, entregarme unos pequeños pedacitos de chicharrones de puerco que les habían llevado para comer.

Es algo que jamás podré olvidar. No fue la comida que me llevaron. Fue la acción que tuvieron acordándose de mí cuando me encontraba en los momentos más difíciles que he vivido. Cuando la noche era más fría y la nostalgia te invade hasta la saciedad. Cuando te sientes más sola que nunca. Cuando casi dejas de creer en la humanidad de un mundo indiferente sumido en su propio egoísmo.

No puedo evitar recordar aquello. En mi mente están vívidas esas imágenes de dos muchachas que ya deben haber muerto hace tiempo. Que sufrieron más que yo el rigor de una prisión porque estaban enfermas. Que supieron compartir con alegría sus alimentos porque sabían que yo apenas probaba el salchocho que me entregaban.

Ellas hicieron algo que estaba prohibido, pero se arriesgaron al castigo para hacerme feliz, al menos, con algo que yo comería. Y así, corriendo, con la misma travesura con que llegaron, volvieron a sus galeras felices de haber compartido conmigo lo poco que tenían para ellas. Me dieron una tremenda lección de que la humanidad aún existía.

Y en ese momento, como Ana Frank escribiera en su Diario, creí en la bondad innata del hombre.

lunes, 21 de diciembre de 2009

¿DESPERTAR DE CONCIENCIA?

Por: Ninoska Pérez Castellón

Finalmente, un grupo de líderes negros e intelectuales condenó por primera vez la deplorable violación de los derechos humanos en Cuba. Felicitemos a este selecto reducto encabezado por Abdías Nascimiento, conocido defensor de Fidel Castro. Bravo, por todos los que después de cinco décadas ininterrumpidas de represión generalizada en Cuba contra blancos, negros y chinos, ahora alzan su voz.

Les tomó cincuenta años, pero escucharon al fin lo que los exiliados cubanos llevamos repitiendo sin cesar. Aunque entre los 60 firmantes de la declaración de afro-americanos condenando el racismo en Cuba, las bajas no tardaron. Makani Themba-Nixon escribió una carta que apareció publicada en el mismo sitio de la Internet donde figuran las reflexiones del racista-en jefe, pidiendo que se retire su firma de la declaración porque considera que: “es manipulada para socavar la legitimidad del importante proyecto social que se lleva a cabo en esa nación” .

Al igual que algunos de los firmantes que, escogió ignorar que en Cuba existe un evidente “apartheid” y que en el caso de los negros no solo se les niega el hospedarse en exclusivos hoteles reservados para turistas, también trabajar en ellos, porque los nuevos esclavistas así lo prefieren.

Salvo la conducta de la ex congresista Carrie Meek, quien ha estado siempre en primera fila a la hora de denunciar los atropellos en Cuba de blancos y negros por igual, o Betty Ferguson, los demás todavía están bajo el malévolo hechizo de Fidel Castro. El ex-preso político Luis Infante respondió de inmediato al reclamo de los afro-americanos, señalando que él y otros negros cubanos llevan años realizando gestiones para llamar la atención sobre la deplorable situación de los negros cubanos. Lo han hecho ante el Caucus Negro de Estados Unidos, la Asociación para el Avance de las Personas de Color (NAACP) que jamás a devuelto sus llamadas y en una reunión con Al Sharpton resultó ser un fiasco.

Sin embargo, señaló que todas las campañas en las que ha participado en defensa de los negros en Cuba, “han sido promovidas por cubanos blancos.”

Para ser políticamente correcta debo suponer que los firmantes del llamado de conciencia, nunca conocieron de un atleta negro llamado Marino Bofill, que intentó escapar durante un campeonato de boxeo en Berlín en plena Guerra Fría. Le echaron los perros, fue brutalmente golpeado por alemanes y cubanos que lo encerraron durante dos meses en un barco de carga y cuando regresó a Cuba cumplió 20 años de prisión. Me imagino que tampoco conocieron de otros negros con los que compartió la represión y la deshumanización, como Eusebio Peñalver, que padeció 28 años de presidio, Alfredo Cadavar, Pastor y Reinaldo Macurán, 25 años, Ignacio Cuesta Valle, alma noble y generosa que cumplió hasta el último día de su condena de 30 años, al igual que Reinaldo Valdés Cancio. Marcelino González cumplió 26 años y he de suponer que tampoco les importó que un negro llamado Olegario Charlot , tras años de padecer abusos en las prisiones castristas, se declarara en huelga de hambre cuando le quitaron su única posesión…una Biblia. Tras su muerte en una celda de castigo en la prisión de Boniato, sus compañeros vieron cómo sacaban su descompuesto cadáver con palas para introducirlos a ellos a ese infierno tras la Masacre de Boniato en 1976.

Debo darle el beneficio de la duda a Carlos Moore y sus colegas por desconocer que el escritor Ángel Pardo Mazorra, era un adolescente cuando fue a prisión por más de dos décadas, al igual que el campesino Esturmio Mesa Shuman. Ignoran a Jorge Luis García Pérez Antúnez quien cumplió 17 años de prisión y quien ahora, junto a su esposa Iris, son golpeados cada vez que alzan sus voces dentro de Cuba, para que se respeten los derechos humanos de blancos y negros. Desconocen el caso de Ángel Moya, que desde una prisión en Cuba desafía al régimen racista de Fidel Castro y a su esposa Berta Soler, integrante de las Damas de Blanco, quien ha aparecido fotografiada en las primeras planas de los diarios, arrastrada por las calles de La Habana por los sicarios castristas.

Nunca se enteraron de una negra cubana llamada Ángela Herrera que dentro de Cuba en 1990 hizo un llamado a la desobediencia civil junto a su hija Guillermina. Fueron acosadas por turbas y posteriormente enviadas a prisión. Ángela, como Martin Luther King, también tenía un sueño, que se desvaneció por el ruido de los aplausos a Fidel Castro.

Es de suponer que estos “prestigiosos intelectuales”, abrumados por sus preocupaciones existencialistas, no leyeron los periódicos en la primavera del 2003 cuando hasta el New York Times publicó el caso de tres jóvenes de la raza negra que por intentar escapar en una embarcación hacia Estados Unidos – en un incidente donde no hubo ni muertos, ni lastimados – fueron arrestados, juzgados, sentenciados y fusilados en 72 horas para que Fidel Castro diera una lección ejemplarizante a los negros en Cuba.

Nunca los he escuchado mencionar a Oscar Elías Biscet en su misiva, que lleva ya más de 10 años privado de libertad. El medico negro comenzó su lucha oponiéndose al uso de Ravinol para abortos en estado avanzado en el paraíso médico de Fidel Castro. Pero supongo que esa no es una causa popular entre los liberales.

El profesor Moore condenó enérgicamente, en su página web, a Fidel Castro y sus hombres, por racistas, junto a Ricardo Alarcón, Osmany Cienfuegos y José Ramón Machado Ventura. Sin embargo, hizo una salvedad con Raúl Castro, porque: “con él las cosas han comenzado a cambiar”.

Evidentemente no lo suficiente, porque la semana pasada escuche llorar a la madre del prisionero Orlando Zapata al denunciar la salvaje golpiza propinada a su hijo y Berta Soler y otras Damas de Blanco fueron nuevamente golpeadas y arrastradas por las calles, tres años después de Raúl Castro haber asumido el poder, con la misma furia y salvajismo que bajo el régimen de Fidel Castro.

En una reciente columna en el Miami Herald, Carlos Moore atribuyó a Enrique Patterson el siguiente comentario: “Patterson cree que muy bien pudiera ser la ausencia del apoyo de exiliados de la extrema derecha a estas causas social demócratas que ahora hace que los afro-americanos se apresuren a defenderla.”

Culpar al exilio de falta de apoyo o calificarlo de extrema derecha son canallescas mentiras. Por mucho que he buscado el historial de algunos de estos personajes solo encuentro alabanzas a una dictadura racista y demasiado larga. Perdonen mi falta de entusiasmo por este repentino despertar de quienes tienen culpa de contribuir a perpetuar una dictadura, por acción y omisión. Pero han visto la luz, demasiado tarde.

jueves, 17 de diciembre de 2009

PELIGRA LA VIDA DE PRISIONERO POLÍTICO Y DE CONCIENCIA. (TOMADO DE PAYO LIBRE).

Reina Luisa Tamayo Danger muestra el pulover ensangrentado de su hijo, Orlando Zapata Tamayo cuando fue brutalmente golpeado y llevado a una celda de castigo.
Peligra la vida de prisionero de conciencia en Camagüey

Doralis Álvarez Soto
17 de diciembre de 2009

La Habana – http://www.payolibre.com/ – El prisionero de conciencia Orlando Zapata Tamayo está en peligro de muerte en el régimen de máxima severidad de la prisión Kilo 8 en Camagüey, según denunció por teléfono desde esa penitenciaría el prisionero opositor Armando Echavarría Carrasco, el pasado 15 de diciembre.

“Zapata lleva una semana en huelga de hambre tirado en el piso de un estrecho y tapiado calabozo de los corredores de la muerte de la mencionada cárcel, donde permanece rodeado de insectos y roedores y se niega a conversar tanto con los guardias como con los presos”, expresó Echavarría.

Por otra parte su mamá, Reina Luisa Tamayo Danger, explicó a este centro de información que está gestionando el traslado de Zapata para sacarlo de ese infernal lugar.

El prisionero de conciencia fue trasladado de la prisión Provincial de Holguín, en su provincia de origen, para Camagüey en los primeros días de diciembre.

Orlando Zapata Tamayo lleva casi 7 años de encierro, desde marzo de 2003, por sus actividades opositoras. Su condena total es de 36 años de cárcel, impuestos por la seguridad del Estado en 9 juicios a puertas cerradas, en los que no han participado sus familiares, ni ha tenido derecho a abogados para la defensa. Su familia reside en calle Embarcadero #6, Banes, Holguín, Cuba.

miércoles, 16 de diciembre de 2009

UN AÑO MÁS (ARTÍCULO)

Por: Manuel Pozo
Expreso político cubano

Para todos los que pasemos estas navidades lejos de la patria.

Y se nos va otro tiempo sin poder regresar.

Cuando se aproxima cada fin de año que he pasado en el exilio siempre recapitulo en las esperanzas deshechas. Desde que salí así he estado: pensando en la vuelta, en el día que caminaré de nuevo por mi Habana.. En mi próxima fiesta de navidad con mi familia cubana, allá adentro, con ellos.

Ha sido el gran desafío del exilio. Soportar la incertidumbre. Medir un horizonte en su espejismo. El tiempo no nos ha vencido, pero sigue acumulando pasado. Hablo con mis amigos y casi todos siguen pensando en volver, aunque algunos, también buenos amigos y excelentes personas, ya desertaron del bando de los que preparamos el equipaje.

Es normal. De los primeros, de aquella generación pionera, ya tenemos miles de ejemplos enterrados en cementerios de muchos estados de la unión Americana. Abuelos y padres de aquel exilio que abrió puertas y que se quedaron con las ganas de volver.

Ya no hablamos de años. Ahora sumamos décadas. Ya llevo 17 años fuera de Cuba. Les juro que no pensé llegar a cinco. En aquel tiempo, cuando arrivé a USA, aposté -lo que no apuesto ahora- que en menos de cinco estaba regresando a casa.

Y muchas cosas han pasado. Ya ni las cuento. Ya me parecen sucesos de un universo común. Como si siempre hubiera vivido en él.

El crimen de Hermanos al Rescate. La Torres Gemelas. El éxodo desde Cuba del 1994 y los balseros de Guantánamo. El niño Elián, etc.

Cada uno de estos eventos y muchos otros han ido sucediendo mientras nosotros crecemos, maduramos y envejecemos lejos de donde somos. Tan lejos que nos amenaza el no poder regresar.

Pero no. Seguimos peleando conciencias. Empeñados en volver victoriosos. Tan patriotas como los que murieron por Cuba. Tan valientes y estoicos como los que libraron decenas de años en prisión política y en tierra de libertad siguen pensando en volver.

Claro que volveré. Por supuesto que allá estaré de nuevo.

martes, 15 de diciembre de 2009

OMARA PORTUONDO CANTA EN EL SHOW DEL ALBA

Si alguien tenía dudas de quién es esta vieja cómplice de la dictadura militar castrista, aquí la tienen cantando en el show realizado en La Habana por el dictador de turno, Raúl Castro y toda la caterva de presidentuchos comprados por el petróleo robado al pueblo venezolano. El sucesor de la corona castrista le besa la mano, el gorila venezolano, Hugo Chávez también, y el recién re-electo boliviano, jugador de futbol devenido en presidente, Evo Morales, la saluda casi de la misma forma para conformar un trío de hijos de su madre rindiéndole a esta llamada artista "apolítica" que le encanta viajar a los Estados Unidos, al "imperialismo yanqui" donde quizás intente cantar: "Siempre es 26", canción que en su voz impusieron a las presas políticas como castigo, con altavoces que rompían sus tímpanos y dañaban sus nervios. La vieja castrista vendrá en marzo de 2010 a cantar en Miami Beach. La esperaremos, por supuesto.

EL BÁSICO, EL NO BÁSICO Y EL DIRIGIDO (ARTÍCULO)

Por: Iliana Curra

Los que pertenecen a mi generación deben recordarlo. Se trata, nada más y nada menos que, del derecho a comprar tres tipos de juguetes racionados por la libreta y que fueron llamados de esta forma. El Básico, que era el juguete principal o el mejorcito, el No básico, era el juguete con menos importancia en cuanto a calidad o no sé qué, y el Dirigido, no era más que, si acaso, un juego de yakis, una suiza o algo menos que ésos dos mencionados.

El derecho a comprar los juguetes para el extinto Día de los Reyes en Cuba llegaba en forma de sorteo. Había varios días en los que tenías la posibilidad de comprarlos, pero cuando te tocara, que podía ser desde el primer día hasta el quinto o sexto. En fin, que el primer día, quizás, pudieras comprar hasta una bicicleta rusa, si es que te tocaba el número uno en la lista, pues solo llegaba una bicicleta por tienda. Luego eran otros tipos de juguetes como son: los bebés, las muñecas, los disfraces de vikingos para los varones, patines, etc. Si te tocaba el segundo día, al menos, podías soñar con algún juguete que valiera la pena, pero a partir del tercero, todo lo que quedaba eran juguetitos que no llenaban la imaginación de ningún niño.

De todas formas ya sabíamos que los Reyes Magos no existían. Habían sido expulsados de nuestros sueños, habían tenido que partir al exilio en busca de la libertad que necesitaban para repartir juguetes sin racionamiento, sin temor a la represión y sin que los llevaran a la cárcel con camellos y todo.

Pero la benevolente revolución tenía para nosotros, los niños de antaño, una forma de vender esos juguetes importados de la Unión Soviética y China, de la mejor manera que saben hacerlo: controlado, limitado y basados en la llamada igualdad social para el pueblo. Al final, todos éramos iguales, pero había otros más iguales que nosotros.

Y era así como siempre nos tocaba, a mi hermana y a mí, comprar casi el último día de la famosa venta de juguetes, donde teníamos que conformarnos con algo parecido a un juguetito que pudiera costar ahora el precio de noventa y nueve centavos en cualquier tienda de Miami. Por supuesto, aquellos estaban por debajo de la calidad de cualquiera de éstos ahora.

Y era así como “celebrábamos” el Día de los Reyes Magos, que ya no llamaban así, porque los Reyes Magos se habían convertido en opositores al régimen y cabalgaban por otras partes del mundo llevando sus sueños en bolsas cargadas al hombro, repartiendo ilusiones a otros niños que no tenían que usar pañoletas de pioneros comunistas, ni gritar consignas arcaicas llenas de odio. Nosotros, seguíamos siendo los niños cubanos que la revolución magnánimamente nos hacía llegar sus limosnas, mientras que los hijos de los dirigentes, o los “hijos de papá”, como se les conocía, tenían los mejores juguetes comprados en países capitalistas que los demás mirábamos como algo lejano e imposible y, boquiabiertos y estupefactos, no entendíamos entonces esa “igualdad social” de la que nos hablaban, mientras nos imponían un sistema que después de 50 años sigue en pie ante la mirada indiferente del mundo libre, los intelectuales de pacotilla y los presidentes electos democráticamente que visitan la isla para tirarle unas monedas de limosnas a los niños de ahora que, ni siquiera, pueden soñar con un juguete, a no ser que tengan familiares en el extranjero que les envíen dólares imperialistas para comprarlos en tiendas de moneda convertible.

El básico, el no básico y el dirigido, pasaron a la historia como una etapa triste de la niñez cubana. Hoy sigue esa misma tristeza en los niños que no tienen acceso a un juguete, ya ni siquiera de la forma absurda en que los vendían en aquella época. El único derecho que tienen es el de sobrevivir simulando y pasar de la niñez a la adultez de un solo salto, perdiendo la mejor etapa de sus vidas.

lunes, 14 de diciembre de 2009

ANEMIA DE ARGUMENTOS (TOMADO DEL BLOG "GENERACION Y" DE YOANI SÁNCHEZ).



un molote agredió el pasado 10 de diciembre a mujeres que sólo llevaban gladiolos en sus manos. Puños levantados -instigados por policías vestidos de civil- rodearon a esas madres, esposas e hijas de los encarcelados desde la Primavera Negra de 2003. Varios de los atacantes se aprendieron el guión a la carrera y mezclaban las actuales consignas políticas con los gastados /slogans/ de hace casi tres décadas. Era una tropa de choque con licencia para insultar y golpear, otorgada –justamente- por quienes debieran mantener el orden y proteger a todos los ciudadanos. En el noticiero del viernes, un periodista llegó a decir que quienes increpaban a las Damas de Blanco representaban al “pueblo enardecido”, pero en la pantalla no se les notaba un solo viso de espontaneidad o de real convicción. Sólo parecían fanáticos con miedo, con mucho miedo.

Me da vergüenza decirlo, pero en mi país los demonios de la intolerancia estuvieron de fiesta el día de los Derechos Humanos. Fueron incitados por quienes hace mucho perdieron la capacidad de convencernos con un argumento o de atraernos con una nueva y justa idea. Ya no tienen ni siquiera una ideología, de ahí que sólo les quede manejar los resortes del temor, apelar a los “ejemplarizantes” actos de repudio para detener la creciente inconformidad. Sin embargo, en los rostros de esos convocados al linchamiento social se podía percibir como la duda alternaba con la furia y la exaltación con los temblores de saberse observados y evaluados. Por doloroso que sea, es fácil prever que quizás un día una multitud igual de irreflexiva y ciega dirija su cólera hacia los que hoy azuzan a unos cubanos contra otros.
A falta de aperturas, de más comida sobre el plato, de cambios estructurales o ansiadas flexibilizaciones, el gobierno de Raúl Castro parece haber optado por el castigo como fórmula para mantenerse. No muestra resultados palpables de su gestión, pero hace sonar los oxidados instrumentos de la coacción y las viejas técnicas del castigo. En los últimos meses ya ni siquiera lanza promesas al vuelo, ni enuncia planes para fechas imprecisas. Más bien se ha llevado la mano al cinturón y no precisamente para apretárselo en un gesto de austeridad o ahorro, sino para usarlo como hacen los padres autoritarios, sobre el pellejo de sus hijos.

viernes, 11 de diciembre de 2009

CONTINÚA EL GUSANO ROJO EN SU LABOR DESINFORMATIVA A LO CASTRISTA.


El Hombre de Cuba Nuestra
La Página de Carlos Manuel Estefanía. Para hablar sin censuras sobre lo que pasa en Cuba y el resto del mundo

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No la defiendas compadreBy cmea62
A propósito del servicio prestado por el Cuban Liberty Council a un periodista de Granma
Solución a la Curra para Cuba, esa no es la de Yoani

La Agencia Virtin Red Informativa, nos envía el artículo Entregan a bloguera medalla hecha “con plata de la dictadura de Batista”, escrita por Jean-Guy Allard un periodista al servicio del órgano oficial del Partido Comunista de Cuba Granma.
Jean-Guy Allard

En su escrito, y con la evidente en su misión de empercudir la imagen de la blogera cubana, Jean-Guy Allard, saca provechoso partido un banquete organizado por este “Consejo por la Libertad de Cuba” para condecorar “in ausencia” a la bloguera habanera Yoani Sánchez
Esto no es de extrañar, Yoani, mientras no se demuestre lo contrario, con sus posiciones críticas, con su actitud dialogante, con su oposición al embargo, y a las intransigencias, del castrismo y el anticastrismo, se ha convertido en el enemigo publico número uno del régimen cubano, la tarea es pues, para los comisarios de Granma, desacreditarla en toda ocasión, Guy Allard pues se limita a hacer el trabajo inmoral por el que le pagan.

Lo que si extraña es lo fácil que se lo pone el Cuban Liberty Council, organización marcada por su ataque implacable, a todos los que como Yoani defendemos vía pacífica para la transición postotalitaria en Cuba.

El marinero y regente de “La Maison du Mojito”, Esteban Casañas Lostal, anticastrista de última hora, a su lado dos miembros de la directiva del Consejo por la Libertad de Cuba (CLC), Ninoska Pérez Castellón (anticastristas de toda la vida) y Mirta Iglesias, junto a ellas, a la derecha Iliana Curra, también pertenece al CLC

En tal caso lo menos que se despierta es la sospecha cuando este grupo ha decidido ”beneficiar” con su medalla a la joven disidente.

Habrá que ver de donde salió la propuesta si de Miami o de La Habana; un acto que nos recuerda el título de aquella película de Tin Tan : ”No me defiendas compadre”.

Emular las tácticas estalinistas no es la solución

Para captar la contradicción basta visitar el blog de una de las activistas mas destacadas del Consejo, Iliana Curra, de la que ya hemos hablado en otros momentos. Y recordar que Yoani es la primera enemiga que tiene la violencia, que defiende para La Curra, diz que de Cuba para su patria.

Desde su blog esta señora, tan lejos de la Generación Y, justifica los métodos usados por los estalinistas italianos al final de la guerra mundial, usados por el comunista Walter Audisio, quien ejecutara a entre otros a Mussolini y a Clara Petacci, a fin de interferir el procesamiento de Mussolini una corte internacional.

Para afianzar sus ideas, muestra de la ideología que subyace en este oscuro personaje, Curra reproduce la foto de los cadáveres ultrajados y colgados cabeza abajo en una gasolinera de la plaza en la Plaza Loreto en Milán

Del trabajo ¿UN CAMBIO EN CUBA SIN VIOLENCIA O VIOLENCIA SIN CAMBIO? publicado por Curra en blog extraemos estas palabras palabras:

Entonces, ¿por qué sentirnos mal porque el sistema castrista se termine por la violencia? ¿Cuál es el miedo a la culminación de un régimen por esa vía? ¿Por qué sentirnos culpables?
Por supuesto, estas posiciones además de empercudir la imagen del Consejo a quien Curra dice servir, estimulan el atrincheramiento del régimen comunista.
Así pues si alguien debe ser condecorado, ha de ser Curra y todos los que le rodean, por ese gobierno que dicen combatir. Al final terminan siendo lo mismo: hijos del jacobinismo; partero por igual del estalinismo y el fascismo.

Como dice el viejo dicho, Dios los cría y el diablo los junta, sin embargo eso no les basta, intentan además arrimar a su braza a quienes no les pertenecen, como ocurre con la antigua pionerita y hoy disidente Yoani Sánchez.

Si los del Cuban Liberty Council quieren dar una medalla, que se la den a su figura más destacasa a esa misma Curra, desacreditada y que les desacredita, con su alma totalitaria.
Por favor no me embarquen en su nave de la muerte, que hace rato hace agua, a una Yoani que de violencia no quiere saber nada.

Ya se sabrá a quien sirve Curra cuando pide esto como “solución final” para la tragedia de Cuba, la misma que convirtió a los comunistas de Italia en los más fuertes de Europa Occidental.
Esta entrada fue publicada el a las 10 Diciembre 2009 y está archivada bajo las categorías Uncategorized. Puedes seguir las respuestas de esta entrada a través de sindicación RSS 2.0. Puedes dejar una respuesta, o trackback desde tu propio sitio.

4 comentarios para “No la defiendas compadre”

Jose L. Martel Dice: 10 Diciembre 2009 a las 9:40 PM Responder
Yo hace tiempo desde que entre en Generacion Y apoyo a Yoani Sánchez y su línea de acción pidiendo insertar a todos los cubanos dentro de la vida social, economica y politica como sociedad civil.

Me extraño la guerra declarada por Armando Silvio Pérez Roura a Yoani desde su micrófono de Radio Mambi y seguido la condecoración que Consejo por la Libertad, poderosa organización que enfrenta al Castrismo por la línea dura a Yoani Sánchez realmente me sorprendió y crea dudas donde todos son un críterio

Iliana Curra Dice: 10 Diciembre 2009 a las 9:49 PM Responder
HOLA, PIONERITO, SABÍAS QUE IBAS A RABIAR. TU ODIO ENFERMIZO, EL CUAL NUNCA USASTE PARA CRITICAR LA MUERTE DE MUSSOLINI, AHORA LO SIENTO UNA VEZ MÁS. TU OSCURÍSIMO PASADO CASTRISTA, TU MADRE Y TU PADRE COMUNISTAS ACÉRRIMOS, TU PAÑOLETA GUARDADA EN UNA URNA DE CRISTAL, TUS IRONÍAS TONTAS Y TUS SENTIMIENTOS SOCIALISTOIDES, NO SON MÁS QUE PARTE DE TU PERSONALIDAD SIN CEREBRO. SUFRE, HIJO, SUFRE. CREO QUE LA SITUACIÓN DE CUBA SE TERMINA CON LA MISMA VIOLENCIA QUE ENTRE AYER Y HOY HAN USADO CONTRA LAS DAMAS DE BLANCOS Y OTROS OPOSITORES. NO JUSTIFICO LA MUERTE DE MUSSOLINI, SOLO DIJE QUE GENTES COMO TÚ, POR EJEMPLO, NUNCA LA HAN CRITICADO. NO TE HAGAS EL SANTITO Y SACA TU PASADO BOCHORNOSO Y DENIGRANTE. EL MÍO, TE LO PUEDO PRESTAR…NO ESCRIBAS TANTA CATIVÍAS…TONTO ÚTIL. ERES UN POBRE DIABLO.

cmea62 Dice: 10 Diciembre 2009 a las 10:44 PM Responder
Currita: ” Dime de que presumes y te diré de que careces”.
Por supuesto, me encantaría que me prestaras tu pasado para saber lo que ocultas entre la fecha de tu nacimiento y 1990, algo podrido se encierra bajo tu charlatanería de anticastrista comecandela, usando el mismo tono y las mismas ideas de los más fanáticos comunistas.
Currita, algo podrido se encierra, pero tarde o temprano se sabrá.
El que te sigue la pista
Iliana Curra Dice: 11 Diciembre 2009 a las 1:52 PM Responder
Ah…Sherlos Holmes…ja,ja,ja. ¿Por qué mejor no te ocupas en el tuyo bien triste, por cierto! Mira, cuando alguien como tú presume justamente de “seguir la pista” a otros, es porque escondes lo peor. Avergüa todo lo que quieras, es tu problema. Nací con tu revolución y no oculto nada. Podrido está tu calvo cerebrito. Pero…sigue, gusanito rojo. Sigue para que tengas algo que hacer, que vivir del cuento no te da. Cuando vuelvas por Miami, búscame para que me digas toda esa porquería en mi cara y te voy a responder, no me escondo como tú detrás de tu computadora. GUSANITO ROJO.

jueves, 10 de diciembre de 2009

HOY, 10 DE DICIEMBRE, DÍA DE LOS DERECHOS HUMANOS...

Pido que sean liberados todos los presos políticos, sin excepción. No amnistía, sino LIBERTAD INCONDICIONAL, que se respeten los derechos humanos de todos los cubanos, que Cuba sea verdaderamente libre para que puedan vivir un mundo mejor y esa dictadura de medio siglo se vaya al Infierno de una vez y por todas.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

CARTA DEL OPOSITOR Y EX-PRESO POLÍTICO, JORGE LUIS GARCÍA PÉREZ (ANTÚNEZ) AL DICTADOR RAÚL CASTRO.


Señor Raúl Castro:

Mi nombre es Jorge Luis García Pérez ``Antúnez'' --ex preso político-- y de nuevo le escribo, no porque pretenda enterarlo de algo que lejos de ajeno es cotidiano en Cuba, por el proceder y política de su gobierno:

Desde hace varios meses soy mantenido junto a mi esposa Yris Tamara Pérez Aguilera en una extrajudicial reclusión domiciliaria por parte de su policía política. Un alto oficial de la Seguridad del Estado la semana antes del concierto de Juanes en La Habana luego de arrestarme me comunicó que en todo el territorio nacional habían emitido una orden de arresto en mi contra y que todos mis pasos tendrían seguimiento en lo adelante. Desde la fecha he perdido la cuenta de las detenciones, en su mayoría violentas.

Señor dictador, permítame unas preguntas que posiblemente le ayuden a aclarar dudas a aquellos compatriotas míos que en algún momento estuvieron esperanzados en que con su gobierno disminuiría la represión, o que incluso pudieran efectuarse aperturas democráticas:

¿Con qué derechos unas autoridades sin previa comisión de un delito pueden impedir el libre movimiento de sus ciudadanos violando así un derecho universalmente reconocido?

¿Qué sentimientos pueden mover a hombres como el capitán Idel González Morfi al golpear con tanta brutalidad a mi esposa --una indefensa mujer-- ocasionándole secuelas óseas por el sólo hecho de llegar hasta una emisora de radio para pedir que se le diera curso a una denuncia sobre probadas torturas que su hermano recibía en una prisión de Cuba?

¿O es que sólo para ustedes existen en nuestro país cinco familias con derecho a protestar y pedir justicia para sus familiares encarcelados?

¿No le avergüenza que sus corpulentos gendarmes permanezcan apostados durante días en las esquinas de una vivienda para impedir que salgamos, incluso monitorear los movimientos dentro de nuestra propia ciudad?

¿Dónde está la ética y profesionalidad de sus subalternos, cuando con sus ridículos operativos provocan la burla de la población casi a diario?

¿Qué siente usted cuando alienta o permite que personas que se dicen hombres golpean y arrastran por las calles a mujeres como Damaris Moya Portieles, Marta Díaz Rondón, Ana Alfonso Arteaga, Sara Marta Fonseca, Yris Pérez y ahora más recientemente a la bloguera Yoani Sánchez?

¿Cómo puede dormir usted tranquilo y sus subordinados después de atropellar con saña en más de una oportunidad a Idania Yánez Contreras mientras se encontraba con varios meses en estado de gestación?

Cómo puede usted y su gobierno hablar de batalla de ideas, cuando constantemente reprime las ideas con golpes y arrestos y años de cárcel?

Quizás sus seguidores no encuentren o no se atrevan a la respuesta, pero yo que me encuentro entre la larga lista de los que no le temen, y le respondo.

Usted actúa así porque es un hombre cruel e insensible al dolor y sufrimiento ajeno, porque fiel a su vocación antidemocrática y dictatorial está convencido que las dictaduras como la que usted preside sólo pueden sostenerse bajo el temor y la tortura, y que la más mínima apertura puede dar al traste con lo que más y único le interesa, mantenerse en el poder.

Finalmente --y retomando mi caso en particular-- le voy a responder sin antes preguntarle los motivos concretos de tanto ensañamiento y represión contra mi persona.

Su gobierno y lacayos cuerpos represivos no pueden perdonar mis dos grandes y únicos crímenes. Primero que casi dos décadas de tortura y tratos crueles durante mi injusta y severa sanción no pudieron quebrar mi dignidad y posición como preso político. Segundo, porque a pesar del acoso y hostigamiento --y sobre todo el riesgo de regresar a la cárcel-- tengo la decisión de no abandonar mi patria en la que continuaré luchando por un cambio que considero tan necesario como inevitable.

Desde la ciudad de Placetas,

Jorge Luis García Pérez ``Antúnez''.

Martes 8 de diciembre de 2009.

lunes, 7 de diciembre de 2009

¿UN CAMBIO EN CUBA SIN VIOLENCIA O VIOLENCIA SIN CAMBIO?





“A quien no conocen otro lenguaje que la violencia, hay que hablarles en su propio idioma”
Winston Churchill


Por: Iliana Curra

Siempre que escucho hablar de un cambio en Cuba, oigo la siguiente frase: sin violencia… Y es cuando me pregunto si necesariamente hace falta que un cambio sea así: sin violencia. Cuando realmente esa violencia ha sido impuesta por la dictadura de casi ya 51 años. Más de medio siglo implantando el terrorismo de estado: el fusilamiento, las torturas físicas y psicológicas, el odio, la división y el miedo. En fin, una violencia sin límites que acarrea al pánico, la desolación y la desconfianza a niveles impredecibles.

Cuba, nuestra isla secuestrada por más de medio siglo, es un ejemplo de la violencia, la represión, el temor a lo que vendría, y es por eso que la gente siempre quiere un cambio sin violencia.

Esa patria golpeada por tanto tiempo tiene miedo a la continuidad del abuso, pero a la vez su gente resiste el hambre, la escasez, el despotismo, la opresión y la tiranía, con tal de no caer en la violencia. Pero, ¿cuál violencia?

Desde el mismo año en que Cuba cayó en la desgracia del castrismo, ha habido violencia, nunca se ha hecho nada que no sea al paso del repudio, los golpes, las bajezas humanas, la destrucción y ese miedo que se lleva en la sangre, todo por esa misma violencia de un régimen abusivo.

¿Por qué entonces tiene que acabar sin violencia? Sería lo perfecto, pero ya sabemos que la perfección no existe. No podemos evitar un final con matices impulsivos, impetuosos…violentos. La violencia engendra violencia, todo el mundo lo sabe, y Cuba no es la excepción después de tanto tiempo viviendo en plena violencia, ya sea físicamente o emocional. Los niños en las escuelas gritan consignas comunistas obligados por la violencia enardecida de una tiranía que la impone. De lo contrario, serían castigados ellos y sus padres también.

Los Testigos de Jehová por años han sido maltratados por no saludar la bandera y negarse al servicio militar obligatorio (o general) como se llama ahora. Los católicos y los que no han creído en esa cosa que llaman revolución han sido rechazados, encarcelados en campos de concentración como la UMAP y maltratados con violencia y ensañamiento. Nada ha sido positivo para un régimen totalitario que exige por la fuerza, así que nada puede pedirse para que se termine.
Entonces, ¿por qué sentirnos mal porque el sistema castrista se termine por la violencia? ¿Cuál es el miedo a la culminación de un régimen por esa vía? ¿Por qué sentirnos culpables?

No se puede sentir, ni miedo, ni culpa por ello. Preocupación es lo que debemos tener todos porque la violencia intranquiliza, nos hace sentir desasosiego, pero no culpa. La única culpa es de esa dictadura que reprime sin cesar, encarcela, fusila, golpea a los presos políticos, a los opositores, al pueblo en general

No, claro que no siento culpa por un final desastroso. Muchos dialogueros han intentado infructuosamente conversar con la tiranía. Eso es como hablar con sordos. Ya nada tiene que hacerse con un régimen que no escucha, pero sigue hundiendo al pueblo en la miseria más espeluznante y apocalíptica de la historia. Nunca Cuba había vivido peores años, decenas de años continuos en una farsa de revolución donde se violan todos los derechos humanos del pueblo.

Es por eso que lo que venga, como sea, llevará a la libertad de Cuba, incluyendo la violencia si fuera necesaria. No he escuchado jamás a un comunista criticar el fusilamiento de Benito Mussollini, el fundador del Fascismo, y su amante, Clara Petacci, y que luego los hayan colgado por los pies para que sirvieran de ejemplo al mundo. ¿Saben por qué? Porque esa era su violencia, la de los comunistas.

En Cuba tiene que acabar esa dictadura militar que ha robado la infancia de todos los niños nacidos dentro de ese régimen, los que aún eran niños cuando llegaron al poder, y luego les robaron su juventud y su madurez para dejarlos en la miseria humana más espantosa que se haya visto, en el desaliento, la frustración, en la falta de incentivo para seguir viviendo. Eso no se paga con nada, solo con la libertad.

Como dijera alguien en un momento: “Es preferible un final espantoso que un espanto sin fin”. La historia dirá la última palabra. Al menos, es mi opinión.

VARELA Y SU PISTOLITA DE AGUA

Por: Iliana Curra

Un nuevo “patriota” se ha sumado a la lista de las ratas inmundas de Miami, a los aruqueros, los duendecitos que intentan el anonimato sin lograrlo, a las “revistas digitales” semanales. En fin, a todo el espectro patriotero anti-exilio que desde hace años le hace el juego a la dictadura de donde tuvieron que salir corriendo directo para un salón de operaciones en Miami a sacarse la bota castrista del trasero.

Y es que este nuevo “patriota”, caricaturista del Herald hasta que le dio por hacerse el Rambo de Miami y apertrecharse allí con una pistolita de agua, ahora es politólogo, analista o cubanólogo, como quiera llamarse. Es el mismo Varela que cuando hacía sus caricaturas en El Nuevo Herald y le pagaban por ello, criticaba al exilio hasta por gusto. Luego criticaba al Herald, siguió siendo un combatiente panelista en el programa de María Larias del canal 41, y además, tiene un blog donde aparece un link de sus nuevos, o quizás no tan nuevos, amiguitos ideológicos: un Inmundo trágico y teatral al extremo, y un enano conocido como “Pancho” Aruca en los medios radiales de su casa.

Y es que, no solo “la tarde se mueve”, también se mueven los intereses de todos estos personajes que terminan todos del mismo lado de la dictadura militar de medio siglo y, de donde –repito- tuvieron que salir volando…perdón, corriendo.

Aruca dijo que salió de la cárcel castrista disfrazado de mujer o de niño bitongo, quizás su tamaño le fue muy favorable, Inmundo dio una vueltecita por Europa para terminar de recibir clases de artes y pinturas clásicas, y cada cual en su trauma extra patria, terminó en Miami llorando como magdalenas de que en Cuba no los dejaban vivir. Aplicaron por leyes que benefician a los cubanos, para luego terminar vociferando contra los cubanos que lograron que esos beneficios existieran.

Uno de los berrinchitos de Varela es contra Ninoska Pérez Castellón y, de paso, menciona a Roberto Martín Pérez, al que seguramente se ha encontrado mil veces por ahí y no ha tenido los huevitos de decirle nada. Pero no importa, el ensañamiento quizás es mejor contra las mujeres, es más fácil.

Este es el nuevo –o quizás no tan nuevo- personajito que prefiere atacar al exilio y enviarle arriba toda una tropa de tipejos que faltan al respeto y difaman de quien lo critica. Es su problema, pero la verdad es que su cobardía rebasa los límites de su tamaño.

Nada más recordar cómo recogió dinero en ese mismo Versailles que ahora denigra. Fue allí mismo donde los cubanos –que ahora ataca- metieron la mano en sus bolsillos para ayudarlo a pagar la fianza legal que le impusieron. Ya no, ya no debe tener problemas de ese tipo, el respaldo de otros personajitos lo han inflado al máximo y se tiente uno más de ellos. ¡Suerte, Varela! Ojala un día te des cuenta hasta dónde has metido la pata aliándote al castrismo.