En la Ermita de la Caridad se realizó este sábado 16 de enero se celebró una misa por Gloria Amaya González, quien muriera sin ver ni a sus hijos ni a su patria libre. Una misa sentida y triste por alguien que, sabemos, continuará su lucha desde el Cielo. Allí estuve junto a otros hermanos que desde el Exilio continúan su lucha por ver a Cuba libre.
Cartel puesto en la Ermita de la Caridad con fotos de la valerosa familia Sigler Amaya. A la derecha la foto de Ariel y al otro extremo la foto de Guido, ambos encarcelados actualmente.
Gloria Amaya murió a la edad de 81 años, pudiera haber durado mucho más si el sufrimiento y el dolor no hubieran intervenido en su vida, una vida larga y llena de tristeza sin descansar jamás, denunciando constantemente el acoso y la represión a que ha sido sometida la familia Sigler Amaya en un pequeño pueblo de Matanzas llamado Pedro Betancourt.
Pero su mayor sufrimiento fue el encarcelamiento de tres de sus hijos. Miguel pudo salir de la cárcel y venir al exilio. Los otros dos aún padecen la represión directa de una dictadura brutal que no tiene piedad con nadie. Hoy Ariel casi está muriendo, en condiciones realmente patéticas, nada más ver las fotos que le hicieron en el velorio de su madre, y Guido tampoco está nada bien. Esto no es más que el resultado de enfrentarse a un régimen totalitario que no acepta los gritos de libertad del pueblo cubano. Es el precio a pagar por querer ser libre a toda costa.
8 comentarios:
Que pena de no estar alli!, pero tu presencia, nos representa a todos los hijos dignos de esa Isla que desean lo mejor para ella. EPD Gloria Amaya. Ramoncito
Con muchisima pena..
No pude asistir por tener una fuerte gripe.
Pero de corazon con Uds!
Descanse en paz Gloria Amaya, una madre todo coraje que no se quedo callada ante la injusticia.
Su lucha y la de todos los valiosos cubanos que enfrentan al totalitarismo cubano no sera en vano.
--Asere, como te dije, tu estuvistes allí, yo lancé un pensamiento en tu nombre.
Claro que todos los cubanos que queremos la libertad de Cuba estábamos allí. Por razones de trabajo o problemas personales algunos no pudieron, pero estaban allí con su corazón.
Todo mi cariño a esa gran mujer.
Todo mi cariño a esa gran mujer.
Gracias, Zoe, y un abrazo para todos.
Publicar un comentario