Si tu injusta prisión no hubiera existido, hoy estuvieras entre nosotros. Si los esbirros, asesinos y sádicos de una dictadura de más de medio siglo no te hubieran llevado al desespero de una terrible huelga de hambre, hoy estuvieras celebrando tus 46 años de edad.
Orlando Zapata Tamayo, podrá pasar el tiempo, los años. Podrán querer cambiar la historia y hacerla desde bloguers y computadoras, desde discursos vacíos y dictados de antemano, desde pedidos de perdón, amor y tolerancia con los verdugos que cercenaron tu existencia. Pero no podrán olvidar tu valentía, tu decoro (el decoro de pocos) y tu sencillez al entregar lo más preciado del hombre: la vida.
Que en el Cielo puedas estar en paz, aunque en paz te fuiste contigo mismo. La justicia todavía queda pendiente. De eso nos encargaremos los vivos.
1 comentario:
DE LEJOS . PERO NO OLVIDO.... ACA ESTOY...... SALUDOS ILI... HONRAR, HONRA
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