LOS DERECHOS DE UN SOLO LADO
Por: Iliana Curra
El Congresista federal por la Florida, David Rivera, ha propuesto un proyecto de ley que ha revuelto a los cubanos en Miami. Debates en la radio, la televisión, la prensa escrita, las redes sociales, los blogs, y todo lo que existe en la democracia, han sido parte de esta vorágine interminable de un tema que apasiona a todos. Y entre pasión y pasión, lo que más escucho es hablar de derechos.
Dicen los que viajan a la isla de manera constante, o los que no lo hacen nunca, pero quieren que otros lo hagan, que “tienen el derecho de viajar”. Otros dicen que “David Rivera no tiene el derecho de negarle ver a su familia”. Algunos hablan del “derecho que le asiste ir a Cuba cuando quieran y a lo que quieran. En fin, y entre derechos y derechos, todos se exigen nada más que aquí.
Y que nadie venga con la historia de que cuando entran a Cuba exigen derecho alguno. Los conozco aquí vociferando que cuando van a la isla son unas monjitas: hablan bajito, entregan todo lo que le quitan en el aeropuerto de Cuba, si los llama un oficial de la inteligencia castrista, tiemblan de miedo y bajan la cabeza, si les advierten que “deben portarse bien”, dicen que solo van a ver a su familia. Les dicen a sus amigos y familiares que no los comprometan hablando de política y que solo van a pasear y comer carne de puerco asada, que es lo más barato allá.
Esos mismos que tanto exigen aquí son los que, cuando van de viaje a Cuba, no te llevan ni un pomo de aspirina a un opositor no reconocido, así que mucho menos a un Antúnez, una Dama de Blanco, un prisionero político.
Tampoco hablan de los derechos de los 75 mil cubanos que están en una lista negra y no pueden viajar a la isla. Por ese derecho no chillan, mucho menos comentarlo allá en Cuba.
Son incapaces de hacer por alguien que tiene a un familiar preso político, para no comprometerse. ¡Mucho cuidado! Eso haría que los montaran en un avión y los pusieran de vuelta en Miami o de donde quiera que hayan salido.
¿Y qué me dicen de los que devuelven directamente del aeropuerto? Sus familiares se quedan afuera con las ganas de verlos, pero ellos, tranquilitos y sin protestar se vuelven a montar en su avioncito de regreso sin derecho a decir nada.
¡Ahhh, es que la democracia vale mucho. Aquí nos llaman trogloditas, carnívoros, intransigentes, come-niños-crudos y, a la par de los partidarios del régimen de La Habana, se ponen en fila para criticarnos porque son “sus derechos”.
No son capaces de tocar a la dictadura ni con el pétalo de una rosa. Allí no protestan, no alzan sus voces, no ayudan a un opositor, mucho menos a un preso. En fin, no hacen “olas” para que nadie los culpe de crear problemas en un país donde levantar la voz, es de por sí una condena al seguro.
¿Y sus derechos, qué? Quedan de un solo lado. Aquí son los exigentes de sus derechos y hasta de sus izquierdos…
Si esos mismos derechos que tanto exigen aquí y que, a la larga los hace hasta cómplices del régimen que los hizo salir corriendo, los usaran en Cuba, las cosas serían distintas. Eso sí que sería llevar la democracia hacia el otro lado del estrecho de la Florida. Pero se la guardan en un bolsillo o la dejan en una gaveta de su closet para cuando regresen.
Los derechos de un solo lado, el de acá. En Cuba ni chistan, pero van a la pachanga, en su gran mayoría, pero sin reclamar el mínimo de sus derechos, mucho menos el de sus familiares. Todo lo contrario, se los quitan para que no los comprometan. ¡Vaya con los derechos…de un solo lado!
Por: Iliana Curra
El Congresista federal por la Florida, David Rivera, ha propuesto un proyecto de ley que ha revuelto a los cubanos en Miami. Debates en la radio, la televisión, la prensa escrita, las redes sociales, los blogs, y todo lo que existe en la democracia, han sido parte de esta vorágine interminable de un tema que apasiona a todos. Y entre pasión y pasión, lo que más escucho es hablar de derechos.
Dicen los que viajan a la isla de manera constante, o los que no lo hacen nunca, pero quieren que otros lo hagan, que “tienen el derecho de viajar”. Otros dicen que “David Rivera no tiene el derecho de negarle ver a su familia”. Algunos hablan del “derecho que le asiste ir a Cuba cuando quieran y a lo que quieran. En fin, y entre derechos y derechos, todos se exigen nada más que aquí.
Y que nadie venga con la historia de que cuando entran a Cuba exigen derecho alguno. Los conozco aquí vociferando que cuando van a la isla son unas monjitas: hablan bajito, entregan todo lo que le quitan en el aeropuerto de Cuba, si los llama un oficial de la inteligencia castrista, tiemblan de miedo y bajan la cabeza, si les advierten que “deben portarse bien”, dicen que solo van a ver a su familia. Les dicen a sus amigos y familiares que no los comprometan hablando de política y que solo van a pasear y comer carne de puerco asada, que es lo más barato allá.
Esos mismos que tanto exigen aquí son los que, cuando van de viaje a Cuba, no te llevan ni un pomo de aspirina a un opositor no reconocido, así que mucho menos a un Antúnez, una Dama de Blanco, un prisionero político.
Tampoco hablan de los derechos de los 75 mil cubanos que están en una lista negra y no pueden viajar a la isla. Por ese derecho no chillan, mucho menos comentarlo allá en Cuba.
Son incapaces de hacer por alguien que tiene a un familiar preso político, para no comprometerse. ¡Mucho cuidado! Eso haría que los montaran en un avión y los pusieran de vuelta en Miami o de donde quiera que hayan salido.
¿Y qué me dicen de los que devuelven directamente del aeropuerto? Sus familiares se quedan afuera con las ganas de verlos, pero ellos, tranquilitos y sin protestar se vuelven a montar en su avioncito de regreso sin derecho a decir nada.
¡Ahhh, es que la democracia vale mucho. Aquí nos llaman trogloditas, carnívoros, intransigentes, come-niños-crudos y, a la par de los partidarios del régimen de La Habana, se ponen en fila para criticarnos porque son “sus derechos”.
No son capaces de tocar a la dictadura ni con el pétalo de una rosa. Allí no protestan, no alzan sus voces, no ayudan a un opositor, mucho menos a un preso. En fin, no hacen “olas” para que nadie los culpe de crear problemas en un país donde levantar la voz, es de por sí una condena al seguro.
¿Y sus derechos, qué? Quedan de un solo lado. Aquí son los exigentes de sus derechos y hasta de sus izquierdos…
Si esos mismos derechos que tanto exigen aquí y que, a la larga los hace hasta cómplices del régimen que los hizo salir corriendo, los usaran en Cuba, las cosas serían distintas. Eso sí que sería llevar la democracia hacia el otro lado del estrecho de la Florida. Pero se la guardan en un bolsillo o la dejan en una gaveta de su closet para cuando regresen.
Los derechos de un solo lado, el de acá. En Cuba ni chistan, pero van a la pachanga, en su gran mayoría, pero sin reclamar el mínimo de sus derechos, mucho menos el de sus familiares. Todo lo contrario, se los quitan para que no los comprometan. ¡Vaya con los derechos…de un solo lado!
23 comentarios:
Usted tiene razon en lo que dice, pero el problema es que esos cubanos carneros ya se han acostumbrado a que aqui si hay derechos y alla no, ellos saben que alla hay una dictadura, y que aqui hay libertad, entonces muy "comodamente" solo gritan donde saben que pueden, mientras alla se comportan como carneros.
Sin embargo no creo que haya que "limitarles" sus derechos aqui, lo que hay es que hacerles ver que se estan comportando como carneros y que con esa actitud estan contribuyendo a que aquellos dictadores sigan en su puesto.
NO NO NO ESA ES OTRA RAZA DE CUBANO
ESO SON LO GUSANO DEL CHE
EL HOMBRE NUEVO Y LA MUJER NUEVA
ESTO ESTUVO BUENO ILIANA. QUE INFELICES DEBEN SENTIRSE LOS CUBANOS DE ESE RETRATO QUE DESCRIBISTE. PORQUE SI SE SIENTEN BIEN CON ESE PERFIL VALEN MENOS QUE EL PESO CUBANO.
Lo repito de nuevo, estan abriendo heridas y declararando la guerra a una parte del exilio en Miami, a sus mismos hermanos, ene la historia del mundo eso es pecado mundial, comenzo el inicio del fin de los verticales en Miami, perderan Miami en 5 anos, amanecera y veran.
Ahora sí. Apareció un Nostradamus en el blog de Iliana. La única guerra sin piedad, declarada hace 50años fue la que desataron los hermanos Castro contra todos los cubanos -incluyéndote-.Preocúpate por éso y no te pongas a pronosticar eventos. La herida se abrió el 1ro de enero de 1959 y no se cierra. Y escucha: los dialogueros, las mulas, los mercaderes, los castristas disimulados o infectados y quienes no entiendan que no hay arreglos con aquel enemigo entonces estarán estorbando la libertad de Cuba. Es posible que alguna vez lleguemos a ser menos (Dios no lo quiera) pero nadie nos quitará la razón.
Para obtener la libertad de Cuba Pozo, oyeme bien : A QUE IR A CUBA a pelear para tenerla, y tu ni tus amigos lo van hacer por pendejos, entonces explicame como llegara esa libertad, ahora si aparecio un Nostradamus.
Tu sabes que el penco eres tú. Lo sabes tú y los que como tú no han hecho otar cosa que cacarear, humillarse y agacharse en cualquier esquina. No abras la boca que se te chorrea. Caretú.
Bueno, el punto es que esos cubanos existen y de acuerdo con el primer comentario, asi que de hecho haran el concierto y nosotros protestaremos. Al incendiario ese que se las pasa mandando a todos para Cuba, pudiera empezar cuando quiera para dar el ejemplo, nada mas...
Por fin Curra, usted trabaja? ó sólo se dedica a escribir boberías?, le pagan por eso?, vamos, no es por nada pero le da ánimos y armas a Juana Bacallao.
Estoy de acuerdo con el congresista. Completamente. A los que cacarean porque tienen familia alla, que se pongan a trabajar duro y a dedicar su esfuerzo y dinero a ver como los sacan de alla, como han hecho muchos que llegaron a USA y al ano ya habian buscado la forma de traer a la familia pero que se dejen de cuentos conque tienen que ir todos los meses a verlos. Si extranan tanto aquello no hubieran venido. No se como habiendo vivido aqui donde desde el primer dia se les trata como personas, estan loquitas por regresar alla donde desde que ponen el pie en en aeropuerto los estan revisando y chantajeando. No merecen la libertad para la que no estan hechos y me recuerdan a aquellas mujeres que el marido las golpea pero que a los pocos dias ya le estan abriendo las patas de nuevo
el circo de la bura de cuba y sus amiguitos
Hay que mandar al ultimo anonimo a que regrese a la escuelita...."Bura"
Bueno Iliana te salvaste! jajajaja
Anónimo preguntón: ¿acaso me pagas? No sufras, no sufras que te arrugas.
Buro, buro, eres Juana Bacallao en pinta, sigue adelante con tu plan castrista que te pega bien.
Julita, esto es de todos los días, pero que siga sufriendo.
Cuando diga quien eres y a que te dedicas, no llores como siempre haces. No tienes ni siquiera un apice de valor para discutir debidamente, tienes que comportarte como una cederista porque no puedes desprenderte de esa doble vida que siempre has llevado. Nada, cosas de cobardes como tu.
No, yo no le pago a Ud. y desde luego parece que me confunde con "juana Bacallao", por fin Ud. vive de ayuda social o trabaja?
Dije que te pareces porque tienes el mismo estilo. Por qué te preoupas tanto, ¿me vas a mandar un cheque?
Ya, a buen entendedor...., no trabajas, vives del cuento.
¡Bingo! Eres brillante e inteligente a más no poder.
Me da Ud. pena, ha tenido una vida difícil, me acuerdo de sus escritos de cuando estuvo en prisión y lo siento mucho, muy bien escrito, pero su blog no tiene la calidad, no me interesa si no me entiendes, un poco más de clase no le vendría mal, y no me confunda m´s ni con la tal juana baca ni con la puta de edmunda.
Hijo, de verdad que tienes fijacion. No leas el blog, no entres a sufrir. Yo no tengo que tener clase, ni dejar de tenerla, es mi problema, no soy academica, no soy intelectual, asi que no esperes lo que quisieras ser tu, hazlo tu y punto. (no tengo acentos aqui).
No tienes acentos dónde? y por qué Ud. infiere que yo sufro?, el que seguramente sufrió fue el muchacho que le dió a Ud. entrada en su página, se acuerda?, el de Irlanda y seguro que por su culpa tuvo que cerrarla, con los lloriqueo suyos se le espantaron todos los asiduos, pobrecito, seguro que Usted no lo dejaría publicar aquí.
Jajajaja, alabao...¡apretaste!
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